
El ministro del Deporte, Jaime Pizarro, manifestó públicamente su respaldo al proyecto de ley que busca establecer una separación institucional entre la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) y la Federación de Fútbol de Chile (FFCh), en línea con las recomendaciones emitidas por FIFA y Conmebol. Actualmente, ambas entidades están dirigidas por una misma autoridad, lo que ha generado inquietudes sobre posibles conflictos de interés y falta de independencia en la toma de decisiones.
La iniciativa legislativa, que ha sido impulsada por el Gobierno y discutida en el Congreso, apunta a delimitar claramente las funciones de cada organismo: mientras la FFCh se enfocaría exclusivamente en el desarrollo de las selecciones nacionales y el fútbol federado, la ANFP se encargaría de la organización de torneos profesionales como el Campeonato Nacional y la Copa Chile.
Pizarro destacó que este modelo ya se aplica con éxito en países como España, donde la Liga Española y la Real Federación Española de Fútbol operan como entidades independientes. “Lo que buscamos esencialmente es promover un espacio de desarrollo y gestión más transparente”, señaló el ministro en entrevista con BioBioChile.
Además, el proyecto contempla medidas adicionales para mejorar la gobernanza del deporte, como la prohibición de agentes y representantes en los directorios de clubes, federaciones y ligas, y la regulación de la multipropiedad, que ha generado controversias en el fútbol chileno por la influencia de ciertos empresarios en múltiples instituciones.
Pizarro también subrayó que esta reforma no solo beneficiaría al fútbol, sino que podría replicarse en otras disciplinas como el voleibol, básquetbol y rugby, que han mostrado un crecimiento sostenido en los últimos años. “Queremos que cada deporte tenga la institucionalidad que le permita desarrollarse con autonomía y responsabilidad”, concluyó.