Nelson Salas Stevens, quien es el abogado de Rodrigo Holgado, conversó con diario La Tercera y entregó algunos detalles quizás desconocidos del accidente que protagonizó el jugador y que costó la vida de un hombre que viajaba en motocicleta.
El abogado fue enfático:
“Es falso que anduviera en una fiesta. Diario La Cuarta lo publicó y se hizo un rumor de esto, pero eso es falso. Estaba en su casa compartiendo con un compañero de trabajo, que también es extranjero (Manuel Fernández). Ellos viven en un condominio cerrado. Este fue el contexto previo, no es que estuviera en una fiesta. Tenemos cómo acreditarlo, porque pude ver personalmente las cámaras de seguridad del condominio, que dan cuenta de que Rodrigo estaba en su casa. Queremos que la Fiscalía también tenga esas imágenes. No era una persona que andaba de carrete ni nada por el estilo. Sí existe esta conducción, pero es en horario posterior al toque de queda”.
Salas agregó:
“Se quedaron hasta tarde jugando videojuegos, quisieron ir a comprar comida.. Fueron a comprar a una estación de servicio y como no tenía efectivo, no pudieron comprar en la primera bencinera. Con posterioridad se desvían e ingresan a la autopista y en ese contexto es que ocurre el accidente. Pero fue así como ocurrieron los hechos”.
En cuanto a como ha tomado todo esto el jugador itálico el defensor penal de Holgado dijo:
“Está sumamente arrepentido. Eso es visible en su rostro, en su actitud. En nuestra primera entrevista nos pide por favor que hablemos con la familia de la víctima, que me pusiera en contacto. Que les pidiera perdón, aunque es consciente de que ningún perdón, ni frase, ni dinero, serán suficientes para poder compensar el daño. Pero está sumamente arrepentido. Sabe que no puede volver atrás, pero es una persona a la que esto le ha impactado y afectado mucho. No solo le ha afectado el encierro, sino este cargo de conciencia”.
Salas por otro lado comentó como tomó el jugador la noticia de poder optar al arresto domiciliario mientras dura lo que queda de la investigación:
“Con mucha alegría, Rodrigo extrañaba mucho a su familia, ya que por el COVID-19 no pudo recibir visitas durante su privación de libertad, además le preocupaba que su grupo familiar se encontraran solo, dado que por los efectos de la pandemia no podían recibir visitas mi apoyo de sus familiares”.
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